Cuando tenemos una conexión a internet a través de un proxy, podemos configurar directamente la dirección y el puerto en nuestro Linux para poder tener acceso completo a internet en nuestro sistema. Sin embargo, si tenemos una máquina virtual con Linux, y el sistema original es Windows con conexión a través de proxy, ya requiere unos pasos un poco más complejos. En esta entrada os enseñaré a cómo configurar el proxy de APT de Linux (para Ubuntu o Linux Mint) y que así podáis instalaros o actualizar el sistema de Linux que uséis.
Por cierto, si alguna vez habéis sentido intriga de por qué APT se llama APT, os recomiendo la lectura detallada de esta entrada. Nunca está de más conocer algo del núcleo del sistema del pingüino…
Quiero leer...
Caso de uso que requiere la configuración del proxy de APT
Primero me gustaría indicaros mi situación de partida, que puede ser similar a la vuestra o no. De cualquier modo, con solo saber que necesitáis configurar el proxy de APT para poder usarlo, sería más que suficiente.
En mi caso empecé a trabajar en una compañía donde me dieron un ordenador con Windows y configurado para acceder vía cable a internet a través de un proxy. Como soy un usuario ¿radicalizado? de Linux, decidí instalar VirtualBox para crear una máquina virtual con Linux Mint. Después de varias peleas para conseguir tener internet en mi máquina virtual usando el del host (que sería motivo para otra entrada), digamos que a través de conexión NAT, y la configuración del proxy de Linux Mint, pude acceder a Firefox y navegar.
¡Bien! Pensé. Sin embargo, me encontré con un problema posteriormente. Cuando accedí al sistema de actualización de Linux Mint, se produjo un fallo de conexión. No conseguía acceder a los repositorios para verificar si había nuevas versiones de los paquetes, o incluso al gestor de paquetes Synaptic (¡muy fan!) para poder instalar nuevo software. ¿Qué sucedía?
Faltaba configurar el proxy de APT de Linux
Pues exactamente eso. Al acceder desde una máquina virtual y configurar el proxy del sistema, esta configuración no funcionaba para que APT estuviese activo. Tenía que hacer una configuración exclusiva para APT.
A continuación os voy dar los pasos precisos y orden para que podáis configurar el proxy de APT de Linux sin ningún problema.
Pasos para configurarlo
Los pasos para configurar el proxy de APT de Linux son muy sencillos.
Primero tenemos que crear un archivo nuevo llamado proxy.conf
en la ruta /etc/apt/apt.conf.d/proxy.conf
. Lo podemos hacer rápidamente con este comando en la terminal de Linux:
sudo touch /etc/apt/apt.conf.d/proxy.conf
A continuación tenemos que editar ese archivo para añadir dos líneas de texto. Esta edición la podemos hacer desde la terminal usando este comando:
sudo vi /etc/apt/apt.conf.d/proxy.conf
O bien, accediendo como Administrador a Nemo (el gestor de archivos de Linux Mint Cinnamon) y abriendo el archivo proxy.conf
desde un editor de texto.
En cualquier caso, al abrirlo por primera vez vemos que es un documento vacío.
Dentro de ese documento tenemos que añadir las dos líneas siguientes, una para el proxy HTTP y la otra para el proxy HTTPS:
Acquire::http::Proxy "http://user:password@proxy.server:port/"; Acquire::https::Proxy "http://user:password@proxy.server:port/";
Si vuestro proxy no requiere usuario y contraseña, y su dirección fuese 127.0.0.1
y el puerto fuese 8080
, el contenido de ese archivo sería:
Acquire::http::Proxy "http://127.0.0.1:8080/"; Acquire::https::Proxy "http://127.0.0.1:8080/";
Una vez rellenado con vuestros datos, simplemente dais a guardar el archivo y desde ese mismo momento ya podréis usar APT a través del proxy recién configurado.